La vitamina E es de las vitaminas con propiedades antioxidantes más potentes que existen. Es por eso que se ha ganado el sobrenombre de la VITAMINA DE LA JUVENTUD. Se trata de una vitamina liposoluble que está presente en la naturaleza, en vegetales de hoja verde, en el aceite y pipas de girasol, frutos secos como las avellanas, nueces, almendras y pipas de calabaza.
El cuerpo humano necesita la ingesta de vitamina E para ayudar a mantener el sistema inmunitario fuerte frente a virus y bacterias. Además, esta vitamina es importante para la formación de glóbulos rojos y previene enfermedades cardiovasculares. Puede ayudar en los trastornos nerviosos y estabiliza y regula la producción de hormonas femeninas.
Pero además de ser un poderoso antioxidante natural, la vitamina E presenta numerosas propiedades:
Potente antioxidante contra los radicales libres, previniendo así el envejecimiento cutáneo.
Presenta un alto poder hidratante, ayudando a calmar la piel deshidratada.
Tiene acción cicatrizante, muy indicada en formulaciones para tratar estrías, cicatrices y pieles irritadas.
Disminuye el picor.
Reduce la agresión de la radiación ultravioleta y a reparar la piel dañada.
Retrasa la oxidación celular.